La mejor película de Stanley Kubrick narra un acontecimiento trágico que ocurre entre las trincheras y los salones de la Primera Guerra Mundial.
Para escarmentar a las tropas de un fracaso en una batalla, el general Mierau (George Macready) convoca un consejo de guerra contra tres soldados acusados de cobardía ante el enemigo alemán, en representación de todo el grupo. El coronel Dax (Kirk Douglas) hace el papel de abogado defensor de esos tres inocentes elegidos al azar para morir ante el pelotón de fusilamiento. Porque sabe que la sentencia es injusta e inhumana.
La escena final, en la que una joven y bella cautiva alemana hace callar a todos con su voz y canta una canción popular, Der treue Husar, que conmueve a las tropas, destruye las ideologías que les separa y lleva a las lágrimas a los derrotados soldados.
Según el director: "La película no transmite mensaje alguno. En ningún caso es una película que vaya en contra ni a favor del ejército. Como máximo es una película contra la guerra, que puede llevar a los hombres a semejantes conflictos de conciencia."
Stanley Kubrick, 1957
Comentarios
Publicar un comentario